Cómo cultivar una planta de jazmin en casa para llenar de color y buen olor tu hogar

Permite que el aroma del jazmín inunde tu casa. Conoce todas las propiedades de esta maravillosa planta.

El jazmín lleva el nombre científico de Jasminum officinale y posee unas 200 variedades. En Asia continental, es considerada una planta muy valiosa para diversos usos. Para los indonesios, simboliza la pureza y la belleza de la mujer, ya que es una de las flores más fragantes que existe. Es proveniente del Himalaya y su suave fragancia es ideal para aromatizar el hogar. Este delicioso aroma suele emerger con mayor potencia durante la noche, lo cual tendrá efectos relajantes sobre tu sueño.

El delicioso olor del jazmín

Beautiful white jasmine flowers on a green bush in the garden.

La distintiva fragancia de jazmín se utiliza a menudo en la fabricación de perfumes, cosméticos y productos de limpieza. El aceite de su flor también es muy buscado y utilizado para toda clase de fines. Se ha incluido en algunos remedios naturales como antidepresivo, relajante, antiinflamatorio y afrodisíaco. Del mismo modo, las flores de jazmín son perfectas para infusiones, ya que se considera que ayudan a prevenir ciertos tipos de cáncer. Por ello una taza de té de jazmín traerá además importantes beneficios para tu salud.

La belleza del jazmín

Esta planta crece en climas cálidos, posee hermosas hojas verdes y delicadas flores, a menudo con cinco pétalos en forma de estrella. Aunque hay diferentes tonalidades, se prefieren los blancos con centro amarillo. Crece como arbusto o enredadera. Se destaca por su belleza y la sencillez de su cuidado. Aunque crece muy bien en grandes jardines, balcones y terrazas, existen variedades que se pueden cultivar en interior y adaptarse a macetas.

Propiedades del jazmín

Si estás nervioso, nada mejor que el té de jazmín. Los científicos aseguran que esta planta contiene linalol, un ingrediente que proporciona un efecto sedante eficaz, ayudando a relajar, reducir el estrés y controlar los estados emocionales.

Otros ingredientes del jazmín son acetato de bencilo, jazmín e indol. Estos son los causantes del olor característico de las flores. A menudo los masajistas suelen aplicar aceites con este ingrediente en los tratamientos cosméticos para dar al cuerpo una textura sedosa y una sensación muy relajante. Es ampliamente usado dentro de la aromaterapia.

El jazmín se puede usar para aliviar el dolor en el cuerpo gracias a sus propiedades astringentes y analgésicas. Es excelente para aliviar los malestares menopáusicos y menstruales. ¿Tienes una infección oral? El jazmín es adecuado para combatir este tipo de patologías. Además es efectivo para aliviar la tos, la ronquera y demás las complicaciones respiratorias, así como la fiebre, el malestar estomacal y las infecciones.

Los tres mejores tipos de jazmín para el hogar

A continuación encontrarás las 3 mejores variedades de jazmín para usar en el hogar. Son fáciles de conseguir y de cuidar y te brindarán el delicioso aroma que las caracteriza.

Jazmín chino

También se le conoce como jazmín de invierno o jazmín trepador. Se puede cultivar tanto en el suelo como en macetas, aunque, como ocurre con la mayoría de las trepadoras, suele preferir un lugar en el exterior. La planta prospera a pleno sol o sombra parcial, pero no crecerá adecuadamente en zonas donde el sol nunca brilla o donde reciba muy poca luz solar. Es una planta que puede aguantar heladas ligeras, por eso tiene cierta tolerancia al frío, pero no soporta temperaturas realmente bajas durante tiempo prolongado.

Esta planta no es exigente con el suelo, pero si necesita un buen drenaje. El jazmín de invierno no tolera la humedad excesiva en sus raíces, por lo que el humus o la tierra empapada eventualmente matarán a la planta o evitarán que crezca bien. Las raíces se pudrirán si se riega con demasiada frecuencia, por lo que debe esperar a que la tierra se seque antes de volver a regar. El riego puede realizarse cada dos días en los meses más cálidos y una vez a la semana en los meses más fríos.

Jazmín real

Es una planta originaria de Arabia. También se la conoce como jazmín español y es una variedad perenne. Además, puede alcanzar una altura de diez metros. Las flores de jazmín necesitan exposición total al sol. Tienes que entender que esta planta proviene de climas cálidos y aunque el jazmín es una planta que ama el calor, tolera muy bien el frío. Puede soportar temperaturas de hasta tres grados bajo cero.

Regar el jazmín es importante durante sus meses de crecimiento y floración. En otras palabras, durante la primavera y el verano. En ambas estaciones, lo ideal es regar cada dos o tres días.

Jazmín estrella

Crece como arbustos o enredaderas y tienen flores blancas, amarillas o rosadas muy fragantes. El jazmín estrella puede soportar temperaturas de hasta -10 grados centígrados. Sólo puedes exponerla a bajas temperaturas cuando la planta ha crecido y tiene suficiente fuerza y vigor.

En sus primeros años, esta enredadera no tolera las heladas extremas. Se recomienda ubicarla un lugar más cálido o resguardado en climas donde los inviernos no sean demasiado duros. Prefiere lugares con sombra parcial o total dependiendo de la fuerza del sol en el área. Lo más importante aquí es proporcionar el mejor drenaje posible para evitar los charcos que tanto daño hacen a la mayoría de las plantas.

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