La planta de jade (Crassula ovata) es una de las suculentas más populares, ya que no solo es muy linda (se caracteriza por tener tallos gruesos, hojas redondeadas y carnosas, además de bordes rojizos), sino que simboliza la buena suerte y puede dejarse tanto en exterior como en el interior.
Aunque se considera de fácil cuidado, es posible que estés cometiendo errores que afecten la salud de la planta y una de las señales son las hojas amarillas. Así que aquí te enseñaremos a identificar algunas de las causas y cómo solucionar el problema para que tus plantas sobrevivan.
Planta jade con hojas amarillas
1- Exceso o falta de agua
Se debe tener cuidado con la cantidad de agua que recibe, pues sus requerimientos son bajos. El exceso no solo afectaría la coloración de las hojas, también puede causar la caída de las hojas y que la planta se pudra. Se debe tener un equilibrio, pues la falda de agua también genera daños.
- A la mayoría de personas les gusta seguir un horario de riego, pero en realidad no es lo más recomendable. Son muchos los factores que pueden intervenir en las necesidades de riego de una planta, así que es mejor observarla y revisar el suelo antes de tomar una decisión.
- Por lo general, se debe regar la planta cuando el suelo se haya secado. De esta manera te aseguras de darle el agua cuando de verdad la necesite.
- Tampoco la dejes seca por demasiado tiempo, ya que el follaje se volverá marrón o amarillo.
- Una planta de jade que se encuentre sana debe tener sus hojas de color verde y suaves.
2- Errores con la iluminación
Las plantas de jade se adaptan bien a los ambientes de interior, siempre que no sea en un rincón o habitación oscura, pues los niveles bajos de luz no son adecuados para mantener su follaje sano.
- Esta planta responde mejor ante una combinación de luz directa e indirecta.
- Cuando luz directa del verano es muy intensa, lo ideal es moverla a un lugar donde reciba pocas horas de luz directa por día, mientras que en el resto del tiempo está en la sombra.
- La planta también puede correr el riesgo de presentar hojas amarillas si se mueve repentinamente de una zona con poca luz a una ubicación con pleno sol. En estos casos la recomendación es hacerlo de forma gradual, para que la planta logre adaptarse.
3- Estrés por trasplante
En ocasiones las plantas tienen muchas dificultades para prosperar en su nuevo entorno, a esto se le conoce como el shock del trasplante. Cuando se hace un trasplante puede ocurrir daño en las raíces, así que no podrán mantener a todo el follaje sano y se producirá el amarillamiento.
- La planta de jade tiene un crecimiento lento, por lo que no será necesario tener que trasplantar con tanta frecuencia. Trata de hacerlo en primavera, en el comienzo de un crecimiento vigoroso, ya que podrá recuperarse mejor.
5- Plagas y enfermedades
Aunque las suculentas tienen una mayor tolerancia a las plagas, su aparición puede dañar las raíces y las hojas. La más común es la cochinilla harinosa, a esta y a otras plagas les gusta morder las hojas y succionar los jugos, lo que genera un amarillamiento irregular en la planta de jade.
- Es importante que revises con frecuencia a la planta. Si observas cuidadosamente el follaje en búsqueda de insectos podrás tratar el problema a tiempo.
- No olvides aislar a la planta afectada para evitar que el problema empeore, dañando a otras plantas. También resulta útil aislar por unos días a las plantas nuevas que lleves a casa.
- Para el tratamiento, frota alcohol isopropilico, aplica aceites de horticultura o jabón insecticida.
6- Envejecimiento
El color amarillo también pueden ser la señal del envejecimiento de las hojas. Las hojas amarillas solo deberían ser un motivo de preocupación cuando la mayoría de ellas tiene esta coloración o si muestran otros signos de alarma. Además, existen algunos tipos de plantas jade que de forma natural ya tienen ese color, como la Crassula ovata Hummel’s Sunset o Árbol de jade dorado.
- Es importante que te asegures del tipo de planta que vas a adquirir (cualquiera que sea). Al conocer cuáles son sus características física y necesidades, podrás cuidarla bien, permitiendo que se mantenga sana y hermosa.