Las orquídeas se encuentran en el top de plantas exóticas que todos desean tener en el hogar, dada su belleza y originalidad, que se atribuye en gran parte a la particularidad de sus hojas. Independiente de cuál variedad elijas o donde la ubiques, ya que al ser una planta epífita se presta para realizar interesantes combinaciones vegetales que no pueden ser ejecutadas con cualquier otra planta. Pero debido a estas peculiaridades, esta es una planta que requiere de cuidados específicos y dedicación, por lo cual puede ser difícil lograr que florezca.
Existe una amplia gama de orquídeas y cada una es un mundo, sin embargo podemos aseverar que la mayoría de orquídeas ofrecen una floración al año, que suele ocurrir hacia finales de febrero. Dependiendo del momento de su ciclo vital los cuidados que debemos aplicarle para conseguir que florezca serán diversos.
Ahora te hablaremos de las diferentes variables a considerar a la hora de buscar que nuestra orquídea florezca.
La cantidad de luz que reciben
Las orquídeas más comunes son las Phalaenopsis, estas no necesitan demasiada luz, suelen ser desarrolladas como plantas de interior, por eso será suficiente con ubicarlas en un espacio iluminado y en condiciones de tamizaje (Filtrado de luz con cortina u otros elementos) para que puedan crecer con todo su esplendor. Por otra parte variedades de orquídeas como las Cymbidium o las Dendrobium, requieren luz abundante.
Una manera de reconocer que tu orquídea está enfermando es observar la coloración de sus hojas, si estas toman una tonalidad verde oscuro a diferencia del usual verde brillante que las caracteriza, estará revelando que necesita recibir una mayor iluminación.
Otro escenario que podemos observar es que las orquídeas también reciban demasiada luz. Tenemos que entender que en su hábitat natural suelen encontrarse bajo la protección de los árboles, lo cual evita su interacción directa con la luz solar.
En caso de que tu orquídea reciba luz solar directa o a través de una ventana que no cuenta con el tamizaje correcto, puede ocasionarse la pérdida de sus hojas al quemarse. Un signo que nos denota luz excesiva es la aparición de manchas amarillas o marrones en las hojas, así como áreas secas en el centro de las hojas, esto es una señal de luz directa excesiva.
La fertilización adecuada
Aunque el cuidado de las orquídeas requiere de condiciones adecuadas de agua, aire y luz, no sólo trata de esto, esta planta también necesita recibir una buena cantidad de abono, pues en caso de que tu orquídea tenga un sustrato bajo en nutrientes , su crecimiento se verá afectado evitando la floración, proceso que requiere de un alto nivel de energía por parte de la planta.
Siempre debes aplicar el abono específico para orquídeas de esta manera podrás verla florecer, y deberás seguir las indicaciones que trae el producto. Evita usar un fertilizante universal, pues algunos de estos fertilizantes pueden ser muy fuertes con las raíces de las orquídeas y pueden destruirlas.
Cambios en el clima
Si queremos que la orquídea florezca debemos permitir que la planta atraviese correctamente por todos sus ciclos naturales. Por ejemplo si la planta no percibe los cambios climáticos que denotan la llegada de cada estación no podrá florecer. Por esta razón será importante que la ubiques en un punto donde pueda recibir los cambios y así mutar y desarrollarse.
Raíces frágiles
La salud de las raíces es indispensable para que la planta esté sana pues si la raíz no se encuentra en un estado óptimo la orquídea no podrá florecer, por eso debes revisar que goce de un color sano y sin secciones podridas. Cuando podes deberás hacerlo con implementos limpios, los utensilios deberán estar afilados y desinfectados.
Aún no es el momento
Diversas variedades de orquídeas sólo florecen cuando llegan a tener mínimo 2 o 3 años de edad. Si el momento de florecer aún no ha llegado la orquídea no dará flor aunque las condiciones sean las óptimas debes esperar al momento indicado.
Consejos para provocar el florecimiento de la orquídea
- El nivel de humedad ideal para una orquídea está entre el 40% y el 80%. Si no contamos con estas condiciones en casa podemos proporcionarlas con el uso de un humidificador o una bandeja de humedad.
- Para lograr el florecimiento una orquídea requiere travesar un lapso de días calurosos alrededor de los 25 grados centígrados y noches con bajas de temperatura de hasta 10 grados centígrados.
- El abono para la orquídea deberá contener nitrógeno, fósforo y potasio, puedes preguntar por uno con esta composición en el vivero más cercano a tu hogar.
- Recuerda hacer el riego antes de abonar, si el abono que conseguiste es sólido, puedes disolverlo en el agua antes de aplicarlo para no lastimar las raíces.