Nunca más se morirán tus plantas, porque con estos consejos tu jardín lucirá hermoso.
Si mueres por tener un jardín en tu hogar, pero no tienes la más mínima idea de cómo cuidar una planta, entonces debes empezar por lo fácil. Desde abajo, con las plantas más sencillas de cuidar. Si una de estas plantas se muere bajo tu cuidado, entonces la jardinería no es para ti ¡No es cierto! Todos pueden llegar a ser jardineros expertos. Sólo debes tener mucho cariño por la planta que adquieras y verás como esta crece sana y bella.
A continuación encontrarás una lista de 10 plantas sencillas de cuidar, pero no por ello menos hermosas o decorativas.
1. sansevieria
- Luz: lo mejor es ubicarla en lugares con mucha luz, ya que es de crecimiento lento. Requiere de mucha energía para crecer derecha y fuerte.
- Temperatura: esta planta prefiere una temperatura entre los 15 y los 20 grados centígrados, pero en verano puede aguantar 30 grados centígrados. Debes evitar que el viento la impacte.
- Riego: riega solo cuando la tierra esté seca. En invierno, basta con regarla dos veces al mes. Sólo debes regarla cuando el sustrato esté seco. Evita pulverizarla, pues no le gusta la humedad.
- Abono: agrega abono cuando empiece el verano, lo ideal es a finales de la primavera y comienzos del verano, y sólo una vez al mes hasta que empiece el otoño.
- Poda: no necesita ser podada, mejor elimina las hojas secas para evitar enfermedades.
- Intenta no tocar las puntas de sus hojas, pues son delicadas y pueden dañarse.
2. Crasas
- Riego: esta planta almacena el agua que necesita para vivir, por ello no debes regar con frecuencia ni en exceso. En verano, hazlo una vez a la semana y en invierno basta con 2 o 3 veces.
- Luz: requiere luz abundante pero jamás directa. Pues si la ubicas en un sitio ante la inclemencia de los rayos del sol puede deshidratarse y las hojas pueden quemarse.
- Sustrato: No son exigentes en cuanto al sustrato. De hecho ciertas especies de crasas llegan a crecer sobre rocas. Sin embargo la tierra debe drenar bien el agua de riego. No pongas un plato bajo la maceta.
- Fertilización: puedes abonar en la primavera y el verano con abonos minerales.
3. Monstera deliciosa o costilla de adán
- Luz y temperatura: En interior, necesita estar en un sitio luminoso y en exterior, puedes ubicarla bajo sombra, sin luz directo del sol.
- Floración: Si la sembramos en maceta bajo techo, no dará flores, pero si la ubicamos en el exterior producirá flores luego de los tres años, entre mayo y octubre. Sus flores son grandes y tienen una forma de espata, son de color crema.
- Temperatura: tolera temperaturas bajas, pero jamás por debajo de los 0 grados centígrados, ya que su parte aérea puede quemarse. Sin embargo se acomoda a temperaturas cercanas a los 5 grados centígrados.
- Riego: durante el verano, en su época de crecimiento, necesita un riego ligero, pues el encharcamiento puede matarla. Debes esperar que la tierra seque entre riego y riego. No necesita ser pulverizada pues aguanta muy bien los ambientes secos.
- Fertilización: En la primavera, se abona una vez al mes.
4. Potos
- Riego: entre cada riego debes permitir que seque la capa superficial del sustrato.
- Luz: Ubica la planta cerca de una ventana, pero nunca bajo el sol directo. Mejor tamizar la luz con una cortina.
- Fertilización: Abona la planta cada mes durante su proceso de crecimiento y cada tres meses en la fase de descanso.
- Poda: corta los tallos cuando se queden desnudos.
- Temperatura: la mejor temperatura para ella está entre los 16 y los 21 grados centígrados. Las mínimas que soporta están entre los 3 y 6 grados centígrados.
5. Cinta
- Luz: no requiere luz directa, ya que, las hojas se pueden secar. Mejor colócala bajo semi sombra.
- Temperatura: tolera temperaturas mínimas de -2 grados centígrados y máximas de 30 grados centígrados.
- Riego: en el verano el riego debe ser frecuente y en el invierno será más espaciado.
- Sustrato: la tierra debe permanecer húmeda. Otórgale buen drenaje
- Fertilización: durante la primavera y verano se recomienda abonar cada 15 días. Y en el otoño e invierno bastará con una vez al mes.
7. Violeta africana
- Luz: requiere luz abundante, excepto durante el invierno. No puede recibir luz directa del sol. Evita las corrientes de aire, pues la lastiman.
- Temperatura: su temperatura ideal está entre los 17 y 21 grados centígrados y no tolera temperaturas inferiores a los 10 grados.
- Riego: debes evitar el riego excesivo, pues si recibe demasiada humedad, aparece un moho gris que ataca sus hojas. Riégala por capilaridad. Para ello ubica un plato con agua bajo la maceta y déjalo por 30 minutos, luego retira el excedente de agua del plato. Hazlo de manera periódica para que la planta no se seque.
8. Lirio de la paz
- Ubicación: debes evitar las corrientes de aire. Durante el verano puedes dejarla en el exterior, bajo sombra y alejada de la brisa.
- Suelo: el sustrato ideal para esta planta debe ser una mezcla de turba con una parte de virutas de corteza y arena de grano grueso, buscando que sea ligeramente ácido.
- Luz: necesita luz tanto en verano como en invierno. Pero siempre indirecta. Lo mejor será colocarla en un sitio con luz moderada.
- Temperatura: la mejor temperatura está entre los 18 y los 25 grados centígrados. De esta manera la planta florecerá desde la primavera hasta el otoño. Puede tolerar hasta 30 grados centígrados mientras mantenga su nivel de humedad. Por otra parte, no aguanta las temperaturas por debajo de los 15 grados centígrados.
- Riegos: durante el verano, el riego debe ser abundante para que la tierra siempre tenga un poco de humedad, pero sin encharcar. En el invierno sólo hidrata la planta de forma ligera, para mantener la tierra húmeda.
9. Helecho
- Luz: aunque puede aguantar la sombra, requiere luz solar abundante, siempre indirecta. Puedes ubicarla junto a una ventana orientada al sur.
- Temperatura: no tolera las heladas ni ambientes muy secos. Su temperatura ideal está entre los 15 y los 24 grados centígrados.
- Riego: durante el verano debes regar las plantas cada día, incluso dos veces por día, para mantener su sustrato húmedo. Durante el invierno disminuye el riego. Hazlo con agua de lluvia templada y pulveriza, haz esto de manera constante.
- Fertilización: puedes hacerlo dos veces al mes en primavera y verano, mejor con fertilizante líquido disuelto en el agua de riego.
10.Bambú de la suerte
- Riego: apórtale agua fresca en un plato y limpia de manera frecuente para prevenir la aparición de bacterias. Cambia su agua cada semana o hasta dos veces por semana. Si notas que el agua se torna oscura o turbia o huele mal debes cambiarla. luego de cambiar el agua revisa el estado de sus raíces y corta la que notes debiles. Lava el recipiente y las piedras. Mantén el mismo nivel de agua cada vez que lo llenes.
- Fertilizante: puedes abonar cada dos meses aproximadamente, hazlo con un fertilizante suave.
- Luminosidad: necesita luz abunda e indirecta.
