Hazte experto en el arte de la floración de estas plantas.
Las orquídeas son un género de plantas con flor muy codiciadas para la decoración. La hacen resaltar su gran belleza y elegancia, además de la variedad de flores que posee. Hoy en día existen más de 25.000 especies y 60.000 híbridos de orquídeas. El cuidado de esta planta es todo un arte y lograr que florezca durante todo el año es un gran reto. Por ello hoy te contaremos todos los trucos y consejos necesarios para que consigas que tus orquídeas se mantengan florecidas y hermosas.
Conseguir que las orquídeas estén en su punto de mayor belleza y brillo con el pasar de los meses, incluso durante el invierno no es una labor imposible. Si las cuidas de la manera adecuada podrás obtener una floración constante. Descubre todos los trucos para mantener tu orquídea en su máximo esplendor por mucho más tiempo.
La variedad de orquídea indicada
Los jardineros aficionados saben que existen métodos para modificar las reacciones de las plantas, engañando a la naturaleza. Hoy te traemos una serie de tácticas para lograr convencer a tus orquídeas de que es tiempo de crecer y evolucionar.
Primero debemos señalar la importancia del tipo de orquídea que selecciones, pues existe una gran variedad para elegir. La más común para tener en casa es la Phalanopsis, si le aplicas todos los cuidados necesarios este espécimen puede durar todo el año florecida.
Condiciones ideales para la orquídea
Debemos empezar por recrear el clima idóneo para mantener a la orquídea en su punto de gloria. La diferencia de temperatura entre el día y la noche debe ser de 5 grados centígrados aproximadamente. A esta planta se le debe proveer condiciones de humedad y temperaturas frescas. Por ello, durante el invierno, la planta se debe ubicar en un lugar cálido en el día y en un lugar fresco para la noche.
Otra manera de manejarlo es posicionar la planta en el balcón hacia el este o al oeste y luego ponerla nuevamente al interior durante la noche. Así podremos evitar que las heladas ataquen las delicadas flores y afecten la fuerza vital de la planta. La exposición solar es necesaria, pero la orquídea no debe recibir luz solar directa y no durante por un tiempo prolongado.
La cantidad de riego para las orquídeas
El riego no debe ser constante y exagerado sobretodo durante la temporada de invierno. Pues cuando la temperatura es baja, la orquídea no requiere estar muy mojada. Sólo debes sumergirla en un envase con agua durante media hora.
Fertilización de la orquídea
La fertilización es clave aquí. Es importante hallar el tratamiento ideal para la planta. Pues no existe una norma que restrinja si el abono debe ser unicamente sólido o líquido. Te aconsejamos consultar en el vivero más cercano el tipo de abono específico para la orquídea que tengas. Si el abono es líquido, sólo debes mezclarlo con el agua de riego.
Otro consejo para la extender la duración de la planta es no abonarla cuando está en flor, pues esto podría ser contraproducente.
Consejos generales para las orquídeas en floración
No existe una fórmula infalible para que las orquídeas permanezcan florecidas, pero si hay una serie de tácticas que puedes implementar para lograrlo. Recuerda que debes proveerle las siguientes condiciones:
- Luz: debe recibir abundante luz indirecta o tamizada.
- Ubicación: protégela de corrientes de aire fuertes y fuentes de calor, ya sea naturales o artificiales.
- Temperatura: la temperatura debe mantenerse superior a los 10 grados centígrados.
- Riego: debe regarse dos veces por semana en los meses cálidos, sin encharcar. Y regar de manera quincenal durante los meses fríos.
- Humedad: es necesario pulverizar agua sobre sus hojas si la planta está en un lugar seco. También puedes ubicar la planta sobre agua y piedras, sin que las raíces toquen el agua.
- Sustrato: debe ser ligero y poroso. Busca en los viveros el sustrato específico para orquídeas.
- Abono: también usa abono específico para orquídeas, ya que el universal puede quemar las raíces.
¿Cómo hacer para que vuelva a florecer una orquídea?
Hacer que una orquídea vuelva a florecer puede ser un gran reto. Y aunque te estés rindiendo en el desafío de la segunda floración, recuerda que es posible lograrlo. Sólo debes estar atento de los siguientes indicadores cuando caen las flores:
- Primero debes identificar el momento para realizar la poda. Debes hacerlo cuando la floración ha terminado y no haya crecido un keiki o planta nueva del nudo de la vara floral. Si la vara posee un nudo, se debe podar arriba de este o quitar la vara. Esto quedará a tu elección.
- Otorga luz abundante a tu orquídea luego de la floración, pero siempre de forma indirecta.
- Agrega fertilizantes específicos al finalizar el invierno, así prepararás la planta para la nueva floración.
- Permite que la planta reconozca los cambios de temperatura de cada estación. Si esto no ocurre, la orquídea no entrará en periodo vegetativo y así no podrá florecer otra vez.
